A nivel nacional, al menos 7 de cada 10 colegios muestran dificultades en sus estructuras y requieren una reconstrucción. Estos hallazgos son el resultado de un seguimiento de la infraestructura escolar en Perú, que ha revelado problemas que van desde cercos perimétricos deteriorados hasta daños y fallos estructurales en los edificios, así como otras cuestiones que comprometen el entorno y las condiciones necesarias para que los estudiantes puedan recibir educación de manera segura.
Por otro lado, existe un alto índice de centros educativos públicos que no tienen el saneamiento físico legal. Este hecho impide que el Estado pueda hacerse cargo realmente del problema, que requiere la inversión de cientos de millones de soles y que, de paso, muestra la ineficacia del propio Estado peruano para resolver los problemas de nuestra sociedad.