Según los datos del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), aproximadamente 11 millones de peruanos están en riesgo de caer en la pobreza este año. La pobreza extrema se refiere a aquellos ciudadanos cuyos ingresos mensuales no cubren el costo de los alimentos básicos necesarios.
En 2022, el 5% se encontraba en la extrema pobreza, lo que representa un aumento del 0.9% en comparación con 2021. Además, se observa un incremento del 2.1% en comparación con 2019. Esto se debe a las pésimas políticas económicas que nuestro país ha seguido tanto en pandemia, como en el Gobierno de Castillo, donde las preocupaciones no estuvieron puestas en los pobres, sino en ser corruptos, aspecto del que no se salva ningún Gobierno de los últimos 30 años.
“Hoy la plata no alcanza para nada, están caras las papas, el pollo, la harina, todo”, aseguran personas consultadas en la plaza. La pobreza urbana ha aumentado del 13.6% (2019) al 21.5% (2022), debido a que nuestros políticos se han centrado en debates que no son prioritarios para las personas en situación de pobreza. Es importante destacar que la población en esta categoría aún no se ha recuperado por completo desde 2019, es decir, ya son cuatro años de abandono total.
Los más pobres del Perú no quieren una nueva constitución, quieren combatir a la delincuencia y poder llevar comida a sus hogares, pero los políticos no los tienen en cuenta.
